jueves, 11 de noviembre de 2010

MASA MADRE


Harina de fuerza.
Agua.

Esta es la masa base para algunas de las recetas de masas fermentadas.
Para hacer esta masa se necesitan 4 días.
Se tiene que buscar un recipiente con tapa que pueda contener 1 l. de liquido y debe ser de plástico alimentario tipo tapervare o de cristal, nunca de metal.
1º día. Se ponen 50 gr. de harina integral
                          50 cl. de agua
Se mezcla bien y se deja en un rincón de la cocina tapado a temperatura ambiente para que fermente 24 h.

2º día. A la mezcla del 1º día se le añade 100 gr. de harina de fuerza y 100 cl. de agua. Se vuelve a tapar y se deja otras 24h. para que fermente a temperatura ambiente, pero resguardado de corrientes de aire.

3º día. A la mezcla anterior se añade 200 gr. de harina de fuerza y 200 cl. de agua. Se tapa y se deja fermentar a temperatura ambiente 12 h.

Si hemos seguido bien el proceso tiene que haber casi duplicado su volumen y en la superficie aparecen unas burbujas que se van hinchando y explotando.
Ya esta lista para ser utilizada. Yo la meto en la nevera y la dejo para el día siguiente.
Esta masa puede durar muchísimo tiempo si la vamos alimentando y cuidando.
Para que nos dure, cada semana, la tenemos que alimentar ya que es un cultivo de levaduras vivo y produce alcohol.
Se tiene que eliminar el alcohol (huele parecido a la cerveza, pero no la provéis porque es malísimo) y se le añade nuevamente una mezcla de harina y agua como hemos hecho el 2º o 3º día. Si el olor es mas a vinagre es que se ha estropeado y hay que volver a empezar el proceso.
También se puede alimentar con miel si una semana no tienes tiempo, aunque es mejor alimentarla con harina y agua.
En las fotos veréis que queda como una espuma por encima.
Si la tenéis en la nevera sacar la cantidad que vayáis a utilizar y dejarla 1 h. para que se temple.
El pote de aluminio que veis en la foto es mas o menos la cantidad que utilizo para muchas recetas.